'Matar o morir', pensé. Me enchufé los auriculares, y terminé de cerrar la situación (no le di tiempo al chofer de prender la radio y sintonizar la más melosa que podía encontrar.. Preferí hacerlo yo). ¿Qué tema me hace acordar a él? ¿A épocas viejas? ¿A amigos que ya pasaron?.. Me costó, pero lo encontré. Y cuando empezó a sonar, parecía que las parejitas enamoradas que viajaban hacia quien sabe qué lugar, eran cada vez más. En el momento no pensás, o lo hacés en una forma exagerada.
Y ahi viene, el momento que más esperás: la charla con vos. Preguntas, preguntas, preguntas. (Una de las cosas más dificiles es superar esta parte sin mandar ningún mensaje delator, hacer alguna llamada indebida, o tirar la toalla y que te supere la situación).
Y pensás en él, y la charla empieza con reproches, pero de a poco se va apagando y se convierte en un confesionario. Vas derechito al arco, pero después flaquéas y te da miedo gambetear. Y vas a abrazar a la tribuna de enfrente, pidiendole perdón por la vez esa que les hiciste el gol de tiro libre. ¡Ah, no! Tarjeta roja, chiquita.
Después viene el albúm de fotos de amigos que en algún momento no estuvieron, que no fueron lo que vos querías, el examen ese para el que tanto habías estudiado, y la profesora esa que te desaprobó porque no es partidaria de la buena onda, y no toleraba tu sonrisita de 'estudié tanto, que no puede irme mal', seguramente se te venga a la cabeza hasta el de la panadería el día que le pediste medio kilo de pan, y te dio 450 gramos. '¡450!' vas a pensar horrorizada.. 'ni comprar el pan me sale bien, hasta el panadero me odia!' (Cualquier semejanza con la realidad es pura coincidencia, diría la telenovela) Te llega a la cabeza una lista de cosas que te salieron mal, un sin fin de cuentas sin pagar, y nadie que quiera hacerse cargo.
(Aunque ya te acostumbraste al sonido, la música sigue sonando.. Cada vez el flechazo es peor, pero a vos ya no te importa tanto)
La historia sigue, y ya es figurita repetida, pero tengo ganas de cambiarla, ¡Yo no conozco al muerto como para pagar por este entierro!
Seguramente para este momento de la historia, afuera empezó a llover.. ¿Qué mejor que bajarse y bailar abajo de la lluvia? Si querés gritar y patalear por lo que fue, hacelo, pero yo prefiero cantar por lo que va a ser, que seguro es mucho mejor.
Ahora es cuando uno aprende a seguir adelante, hay formas y formas, todas distintas e igualemente válidas. Podés cambiar el perfume, si sos de las personas que se alimentan del pasado. Comprate uno con olor a eucalipto, lavanda, canela... No sé, lo importante es que tenga un olor nuevo, asi te desligás del viejo.
Si sos de esas personas que saben despedirse, y a las que no les cuesta decir 'buena suerte' cuando terminan una situación, lo mejor va a ser que te guardes el perfumito viejo, ese que te hace acordar a los abuelitos felices, las nubes de colores, las parejas abrazadas, y los amigos para toda la vida. Desparramá el perfume en todos lados, que invada tu vida, y cada vez que lo sientas acordate que de todas esas cosas está formada tu vida.. No es necesario que tengas un novio para abrazar, una mamá que te cocine un guiso, o una abuela que te teja una bufanda.. Es importante recordar que en algún momento estuvo, o va a estar.. ¡Lo mejor siempre está por venir!
Ahora veo que puedo pegarle un portazo a las tardes de domingo, que no tienen nada de tarde, ni de domingo, pero se sienten asi igual, en el momento en que yo decida hacerlo, y que está permitido caerse, achancharse, bajonearse, desanimarse, pero es más que obligatorio levantarse!
Me encantó.
ResponderEliminarHay una canción de los Enanitos Verdes que dice: "Hay que correr el riesgo de levartarse y seguir cayendo..."